A quien madruga (si desayuna), ¿Dios le ayuda?
- Carlos Sierrra, PhD
- Noticias
El refranero popular español es sabio, ya que el dicho “a quien madruga (si desayuna) Dios le ayuda” puede tener una base científica, tal y como acaba de sugerir un estudio hispano-francés en el que han participado investigadores del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y el Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), entre otros, que ha sido publicado en la revista International Journal of Epidemiology.
Concretamente, han visto que desayunar después de las 9 de la mañana aumenta en un 59 % el riesgo de desarrollar diabetes de tipo 2 en comparación con hacerlo antes de las 8 de la mañana.
Asociación entre diabetes tipo 2 y el horario del desayuno
La diabetes tipo 2, al contrario que la de tipo 1 que está asociada a factores genéticos e inmunes, está ligada a factores de riesgo modificables como la dieta no saludable, la vida sedentaria y el alcoholismo y el tabaquismo. Pero no son los únicos ya que, “el horario de las comidas juega un papel clave en regular los ritmos circadianos y en el control de la glucosa y los lípidos, por lo que puede haber una relación entre el horario de las comidas y la diabetes tipo 2”, declaró a Univadis España la Dra. Anna Palomar, investigadora del ISGlobal experta en crononutrición y participante en este estudio.
Para profundizar en la posible asociación entre el horario del desayuno y la incidencia de diabetes de tipo 2, los investigadores siguieron durante dos años los hábitos alimentarios de 103.312 personas adultas (79 % mujeres, edad media 42,7 años) de la cohorte francesa NutriNet-Santé, para evaluar durante los años siguientes el estado de salud de las y los participantes a lo largo de los años siguientes (en total, 7,3 años en promedio). Los datos alimentarios de los participantes se obtuvieron gracias a un registro en línea en el que los propios participantes anotaron lo que habían comido y bebido durante 24 horas, en tres días no consecutivos, así como los horarios a los que realizaron las ingestas de alimentos..
Los resultados mostraron que durante ese tiempo aparecieron 963 nuevos casos de diabetes tipo 2, siendo el riesgo de desarrollar la enfermedad significativamente mayor (un 59 %) en el grupo de personas que desayunaban habitualmente después de las 9 de la mañana, comparado con las que desayunaban antes de las 8 de la mañana.
El efecto de la frecuencia de las comidas y el horario de las otras comidas
En este estudio también se observó que el número de veces que se toman alimentos y la hora a la que se cena tiene un efecto sobre el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Concretamente se encontró que una cena tardía (después de las 10 de la noche) parece aumentar el riesgo, mientras que comer con más frecuencia (unas cinco veces al día) se asoció con una menor incidencia. En cambio, extender el ayuno solo resulta beneficioso si se hace desayunando antes de las 8 de la mañana y cenando pronto.

Conclusiones
“Estos resultados sugieren que una primera comida antes de las 8 de la mañana y una última antes de las 7 de la tarde podría ayudar a reducir la incidencia de diabetes de tipo 2,” resumió el investigador de ISGlobal, Dr. Manolis Kogevinas. Sin embargo, estos resultados “hay que tomarlos con mucha precaución, como es habitual en el campo de la nutrición”, declaró a Univadis España el Dr. Martí Juanola, doctor en nutrición por la Universitat Rovira i Virgili y experto ajeno al estudio.
“Primero, la cohorte utilizada fue muy grande, pero únicamente francesa, la cual tiene unos hábitos alimentarios particulares que pueden llegar a ser muy diferentes de otros países europeos y, no digamos, del resto del mundo. Segundo, es muy razonable suponer que el horario al que se ingieren las comidas y la frecuencia con la que se come tenga un impacto en el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, pero es extremadamente difícil cuantificarlo. En este estudio se habla de hasta un 59 % más de riesgo en las personas que desayunan después de las nueve de la mañana comparado con las que lo hacen antes de las 8, pero también habría que analizar la abundancia del desayuno, que alimentos habitualmente ingieren para desayunar, qué tipo de vida tienen, que trabajo desempeñan, su edad, etcétera”, desarrolló el Dr. Juanola. “Es decir, hay múltiples variables que influyen y que este trabajo no ha considerado, por lo cual son necesarios nuevos estudios”, continuó el experto en nutrición.
“Por último, y no menos importante, hay que ser extremadamente cuidadoso en cómo se transmiten a los no expertos este tipo de resultados. Considero que son muy relevantes y de gran interés, pero mal comunicados pueden incluso llegar a ser contraproducentes y dar lugar a equívocos, cómo que se piense que con adelantar el horario del desayuno a antes de las 8 de la mañana ya es suficiente para disminuir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Y no, no lo es ni de cerca porque obviamente es más saludable desayunar a las 9:30 un café solo sin azúcar con unas tostadas de pan con aceite de oliva virgen que desayunar a las 7:30 un café con leche y azúcar con cereales y un croissant, por ejemplo”, clarificó para concluir el Dr. M. Juanola.
Desafortunadamente este artículo no esta disponible para usuarios no logados
Has alcanzdo el límite de artículos por usuario
Acceso gratuito Un servicio exclusivo para profesionales sanitarios