Los reumatólogos temen las repercusiones de la precariedad laboral en la Medicina privada

  • Noticias profesionales
El acceso al contenido completo es sólo para profesionales sanitarios registrados. El acceso al contenido completo es sólo para profesionales sanitarios registrados.

Los días 28 y 29 de octubre se ha celebrado en Madrid la IV Jornada SER de Reumatología Privada, organizada por la Sociedad Española de Reumatología. Durante la misma se ha puesto de manifiesto los retos de la Medicina privada. Entre otras cuestiones preocupa que la precariedad laboral en la Medicina privada pueda tener repercusiones negativas en los pacientes.

Cabe recordar que la precariedad laboral en la Medicina privada viene influida negativamente por los baremos que fijan las grandes compañías. Sobre esta cuestión aportaba más información Marcos Paulino, coordinador de la jornada. “En España la práctica de la Medicina privada representa el 2,6 por ciento del PIB. Sin embargo, más del 95 por ciento de los facultativos que ejercen en ella son autónomos”.

Es por ello que la Sociedad Española de Reumatología ha firmado, junto con una decena de sociedades científicas el ‘Manifiesto Dignifica’. “Nos preocupa que el deterioro en las condiciones laborales y la congelación, desde hace décadas, de lo que se paga al médico por acto clínico o quirúrgico, perjudique la calidad y esto pueda poner en riesgo la seguridad del paciente”.

Hacer frente a la precariedad laboral en la Medicina privada

Ante la situación de precariedad laboral en la Medicina privada es necesario tener en cuenta diversas herramientas. Para empezar, gracias a la tecnología, los datos que se generan a diario relacionados con la salud de las personas, y que quedaban en el olvido de la historia clínica de cada paciente, pueden servir para mejorar la calidad asistencial.

En este sentido, el uso de herramientas como la video-consulta contribuyen a mejorar la comunicación entre los pacientes y los especialistas. Todo ello evitando en los casos que es prescindible tener que asistir de forma presencial a la consulta. Esto agiliza la atención a los pacientes y les evita desplazamientos innecesarios.

Estos cambios no deben olvidar que es imprescindible que el paciente esté en el centro de la atención sanitaria. “En este sentido, las herramientas digitales pueden favorecer una atención más constante y cómoda para los pacientes, pero no van a remplazar la atención presencial”, insistía Marcos Paulino.