Los microARNs como predictores de gravedad de la COVID-19

  • Carlos Sierra, PhD

  • Maria Baena
  • Noticias
El acceso al contenido completo es sólo para profesionales sanitarios registrados. El acceso al contenido completo es sólo para profesionales sanitarios registrados.

Dos años después de la declaración del carácter pandémico de la COVID-19 por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se mantienen grandes interrogantes sobre las razones por las que la infección por el SARS-CoV-2 puede provocar un espectro tan amplio de respuestas, desde estados asintomáticos o muy leves, hasta casos de extrema gravedad e, incluso, la muerte.

Es por ello que investigadores de todo el mundo están dedicando grandes esfuerzos al estudio de biomarcadores que ayuden a predecir la evolución de las personas con COVID-19, para, en caso de mal pronóstico, poder tomar con la máxima antelación posible todas las decisiones que mitiguen en la medida de lo posible el riesgo asociado a la COVID-19 grave.

Uno de los potenciales caminos para lograrlo es la búsqueda de microARNs, pequeñas secuencias de material genético que regulan diversos procesos biológicos, involucrados en la respuesta inflamatoria asociada a enfermedades víricas del tracto respiratorio, como es la COVID-19. Esta vía de estudio se apoya en el hecho de que son conocidos microARNs afectados por enfermedades como la del virus respiratorio sincitial o el MERS, entre otros.

Por ello, un equipo de científicos liderados por investigadoras del Centro Nacional de Microbiología (CNM) del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) han estudiado los perfiles de microARNs plasmáticos en pacientes con distintos grados de gravedad con el objetivo en mente de identificar microARNs cuya expresión estuviese alterada respecto a los de personas sanas. Los resultados de este estudio han sido recientemente publicados en la revista Emerging Microbes and Infection

Doscientos microARNs alterados

Los resultados del estudio no dejan lugar a duda, la infección por SARS-CoV-2 altera la expresión de microARNs plasmáticos, en concreto en 200 de ellos.

Para llegar a esta conclusión, los investigadores realizaron un estudio observacional multicéntrico con muestras de plasma de 96 pacientes con COVID-19, con distinto grado de gravedad, desde asintomáticos a moderados y graves (32 severos, 52 moderados y 12 asintomáticos y leves), tomadas de marzo a agosto de 2020 en tres hospitales públicos de la Comunidad de Madrid: el Hospital Universitario Infanta Leonor, el Hospital Universitario Del Tajo y el Hospital Universitario Príncipe de Asturias. Los resultados obtenidos fueron comparados con los del grupo control formado por 13 personas que no habían padecido la COVID-19 hasta la fecha.

Estas muestras fueron caracterizadas mediante secuenciación masiva de microARNs, que permitió identificar todas las moléculas de microARNs presentes en las muestras de los pacientes. Este hecho fue el que distinguió a este estudio frente a otros precedentes, ya que, “hasta ahora, otros estudios han investigado el papel de un número de microARNs concretos, en cambio, nosotros hemos realizado un análisis masivo que abarca todos los microARNs conocidos que aparecen durante la infección”, declaró a Univadis España la Dra. María Ángeles Jiménez Sousa, investigadora del CNM-ISCIII y co-directora, junto con la Dra. Amanda Fernández Rodríguez, de este estudio.  

De esta forma, los investigadores de este estudio han conseguido poner de manifiesto la profunda alteración de la expresión de 200 microARNs plasmáticos en los pacientes con COVID-19 desde una etapa muy temprana de la enfermedad, lo que les permitió identificar diferentes firmas específicas de microARNs asociados a cada nivel de gravedad.

Implicaciones de las alteraciones en microARNs

Los resultados obtenidos pusieron de manifiesto “la existencia de una importante desregulación de los miARNs desde el momento del ingreso hospitalario, que es, además, predictiva de gravedad y mortalidad”, explicaron las Dras. Jiménez Sousa y Fernández Rodríguez a Univadis España

Los microARNs, por lo tanto, confirmaron así su papel clave en el control de las infecciones virales, ya que las variaciones en su expresión ligadas a la infección pueden ser detectadas incluso antes que el propio virus. Concretamente, el análisis ha permitido observar de forma generalizada una mayor abundancia de microARNs positivamente correlacionados con marcadores proinflamatorios en todos los pacientes infectados por SARS-CoV-2, una firma genética que se ve especialmente en pacientes sintomáticos con una evolución grave de la enfermedad. 

Estos resultados han permitido, además, generar un modelo de riesgo predictivo de la mortalidad basado en los perfiles de los 10 tipos de microARNs que mostraron una mayor desregulación en los pacientes que formaron parte del estudio (hsa-miR-4665-5p, hsa-miR-3190-3p, hsa-miR-331-3p, hsa-miR-4525, hsa-miR-431-5p, hsa-miR-6721-5p, hsa-miR-4661-5p, hsa-miR-548a-3p, hsa-miR-4745-5p y hsa-miR-3150b-3p). De esta forma, se puso de manifiesto “la existencia de una importante desregulación de los miARNs desde el momento del ingreso hospitalario, que es, además, predictiva de gravedad y mortalidad gracias a la elevada capacidad que mostraron los microARNs como biomarcadores para discriminar los diferentes grados de la enfermedad”, explicaron las Dras. Jiménez Sousa y Fernández Rodríguez a Univadis España.  

Potenciales aplicaciones

​Las infecciones causadas por la COVID-19 alteran el perfil de expresión de los microARNs de las células a las que infectan, provocando la aparición y desarrollo de procesos inflamatorios y patologías autoinmunes; por ello, ahondar en el conocimiento del funcionamiento de los microARNs durante la infección podría mejorar el manejo clínico de la enfermedad. Sin embargo, “todavía es pronto para aplicar los resultados obtenidos en el manejo clínico de la enfermedad, hace falta validar los resultados en otras poblaciones, ya que la cohorte con la que se realizó este estudio es mayoritariamente caucásica e hispánica”, declaró la Dra. M. A, Jiménez Sousa. Además, “realizar un análisis masivo de microARNs es costoso (aproximadamente 500€ por muestra) para hacer un barrido general e identificar moléculas alteradas, por lo que en la práctica clínica se abordaría su análisis por técnicas más económicas, como por ejemplo la PCR. Pero, a pesar de ello, si desarrollamos un panel que incluya únicamente los microRNAs que hemos observado alterados al inicio de la infección, está técnica podría ser apta para su uso en todos los hospitales tanto desde el punto de vista económico como por la tecnología disponible”, concluyeron las investigadoras directoras del estudio