Guía de práctica clínica sobre trasplante de sangre y médula ósea en niños con neoplasias malignas (ASCTC, 2023)

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La Sociedad Americana de Trasplantes y Terapia Celular (ASCTC, por sus siglas en inglés) publicó en febrero de 2023 la nueva guía de práctica clínica para el trasplante de sangre y médula ósea en niños con neoplasias malignas en la revista Transplantation and Cellular Therapy.[1]

Se deben revisar las muestras de diagnóstico y recaída, confirmar leucemia actual, tumores sólidos o leucemia extramedular.

El electrocardiograma (ECG) y el ecocardiograma para el acondicionamiento mieloablativo deben mostrar una fracción de eyección izquierda de ≥45 %. Se debe llevar a cabo una resonancia magnética (RM) cardiaca en T2* si el paciente ha recibido muchas transfusiones y presenta ferritina elevada o se conoce un contenido elevado de hierro en el hígado.

Si la función renal permanece estable en el curso del tiempo, sin antecedentes de agentes nefrotóxicos importantes, se deben obtener los niveles de creatinina sérica o una estimación no invasiva de la tasa de filtración glomerular (TFG). Si la función renal es limítrofe o existe un riesgo elevado de insuficiencia renal, la estimación de la TFG mediante métodos de isótopos nucleares es el enfoque típico.

Siempre que sea posible, deben realizarse pruebas de función pulmonar (espirometría, pletismografía, capacidad de difusión pulmonar para el monóxido de carbono). Si hay disfunción pulmonar antes del trasplante de células hematopoyéticas (TCH), puede ser necesario realizar una consulta neumológica y modificar el acondicionamiento del TCH.

Se debe derivar a consulta con Endocrinología para determinar la antropometría y el estado nutricional iniciales con el objetivo de identificar niños con sobrepeso o desnutridos con alto riesgo de peor resultado nutricional. Obtener niveles iniciales de electrolitos y vitamina D.

Se deben medir el aspartato-transaminasa (AST), la alanina-transaminasa (ALT), la fosfatasa alcalina, la bilirrubina y la albúmina séricas. Evaluar los riesgos de flebotrombosis (p. ej., inotuzumab, sobrecarga de hierro o antecedentes de uso prolongado de nutrición parenteral total [NPT]).

Considerar evaluaciones iniciales de hiperlipidemia, función tiroidea y cortisol matutino temprano (si hay antecedentes de uso de glucocorticoides) o pruebas de estimulación mediante cosintropina (si hay muchas probabilidades de insuficiencia suprarrenal pero el cortisol matutino es normal).

El niño debe recibir consultas tempranas con trabajadores sociales, especialistas en cuidado infantil o un psicólogo.

Todos los pacientes deben someterse a pruebas de detección del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), virus linfotrópico T humano (HTLV) 1/2, citomegalovirus (CMV), virus de Epstein-Barr (EBV), virus del herpes simple (HSV), virus de la varicela-zóster (VZV), virus de la hepatitis B (HBV), virus de la hepatitis C (HCV), virus del Nilo Occidental, sífilis, enfermedad de Chagas y Toxoplasma.

Para más información, consulta Trasplante de células madre hematopoyéticas.