Guía de práctica clínica para la encefalopatía hepática (EASL, 2022)
- Guías de Práctica Clínica
Asociación Europea para el Estudio del Hígado
Estos son algunos de los aspectos más destacados de las recomendaciones, sin análisis ni comentarios. Para obtener más información, ve directamente a la guía haciendo clic en el enlace de la referencia.
En junio de 2022, la Asociación Europea para el Estudio del Hígado (EASL, por sus siglas en inglés) publicó la guía clínica para el tratamiento de la encefalopatía hepática en el Journal of Hepatology.[1]
Deben medirse los niveles de amoniaco en plasma en pacientes con delirio/encefalopatía y enfermedad hepática, ya que un diagnóstico de encefalopatía hepática es cuestionable en el contexto de un valor normal.
Los disacáridos no absorbibles deben usarse para tratar a los pacientes con encefalopatía hepática encubierta.
Se debe considerar el trasplante de hígado para los pacientes con encefalopatía hepática recurrente o persistente. Deben derivarse para evaluación en un centro de trasplante tras un primer episodio de encefalopatía hepática manifiesta.
Se recomienda la profilaxis secundaria con lactulosa después de un primer episodio de encefalopatía hepática manifiesta. La lactulosa debe regularse de modo que se logren 2-3 deposiciones diarias.
Se recomienda el uso de rifaximina para la profilaxis secundaria (como complemento de la lactulosa) en caso de que ocurran uno o más episodios adicionales de encefalopatía hepática manifiesta durante de los 6 meses posteriores al primer episodio.
La encefalopatía hepática se puede prevenir en pacientes que presenten hemorragia gastrointestinal mediante la extracción rápida de sangre del tracto gastrointestinal (lactulosa o manitol por sonda nasogástrica o enemas de lactulosa).
Antes de la colocación no urgente de una derivación portosistémica intrahepática transyugular se puede valorar el empleo de la rifaximina para la profilaxis de la encefalopatía hepática en pacientes con cirrosis y episodios previos de encefalopatía hepática manifiesta. En este contexto, valdría la pena seguir estudiando los disacáridos no absorbibles, solos o en combinación.
No se recomienda la suplementación de rutina con zinc en pacientes con encefalopatía hepática.
Los pacientes con mielopatía hepática deben ser considerados lo antes posible para un trasplante hepático, ya que no existe otra opción terapéutica.
La terapia dopaminérgica debe probarse en pacientes con parkinsonismo asociado a cirrosis.
Para obtener más información, por favor, ve a Encefalopatía hepática.
Desafortunadamente este artículo no esta disponible para usuarios no logados
Has alcanzdo el límite de artículos por usuario
Acceso gratuito Un servicio exclusivo para profesionales sanitarios