Fibrilación auricular y deporte: ¿qué hay que tener en cuenta?
- Dr. med. Thomas Kron
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En los últimos años, el deporte ha cobrado cada vez más importancia en la prevención y el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, los estudios de atletas masculinos con volúmenes e intensidades de entrenamiento elevados a largo plazo han mostrado una prevalencia de fibrilación auricular entre 5 y 8 veces superior a la de la población general, informa un equipo dirigido por el cardiólogo deportivo de Múnich, el profesor Martin Halle y Felix Stegmüller (primer autor). Sin embargo, el ejercicio de intensidad moderada podría reducir significativamente la prevalencia de la fibrilación auricular. En un artículo reciente, los autores explican lo que hay que tener en cuenta desde la perspectiva de la cardiología deportiva en pacientes y atletas con fibrilación auricular.
Según los cardiólogos y médicos deportivos, el aumento de la prevalencia de fibrilación auricular en los deportistas obedece a varias razones: debido al entrenamiento se producen cambios fibróticos como consecuencia de la carga de volumen y el aumento de la tensión de la pared, "especialmente a nivel auricular". Esta fibrosis favorece la aparición de fibrilación auricular en atletas de edad avanzada. Además, se cree que la estimulación adrenérgica, a menudo pronunciada, y la ingesta de sustancias ilegales (como los estimulantes) podrían también desempeñar un papel importante. A menudo, los atletas con fibrilación auricular presentan "adaptaciones fisiológicas". Sin embargo, la dilatación auricular más allá de este nivel fisiológico se observa en muy raras ocasiones.
Evaluación de riesgos y opciones de tratamiento
Desde el punto de vista clínico, la fibrilación auricular en los deportistas se manifiesta principalmente por un rendimiento (atlético) limitado, palpitaciones y, sobre todo, un aumento de la frecuencia cardiaca en reposo y durante el entrenamiento. Clínicamente relevante es sobre todo el aumento del riesgo de sufrir ictus isquémicos. El riesgo de tromboembolia puede evaluarse en atletas con fibrilación auricular, así como en otros pacientes con esta arritmia cardiaca, mediante la puntuación CHA2DS2VASc. Según los autores, las opciones terapéuticas para los deportistas con fibrilación auricular también se corresponden con las de la población general.
Sin embargo, cabe destacar que muchas estrategias farmacológicas para el control del ritmo y/o la frecuencia no son bien toleradas por los deportistas debido a sus efectos negativos sobre el rendimiento. Los betabloqueantes, por ejemplo, provocan una mayor disminución de la frecuencia, especialmente en los deportistas de resistencia que ya tienen frecuencias cardiacas en reposo inferiores a 50/min. Además, los antagonistas del calcio y los digitálicos no suelen ser muy eficaces, señalan Martin Halle y Josef Niebauer, del Hospital Universitario de Salzburgo, en otro artículo sobre el tema. También debe tenerse en cuenta que, cuando se toman antiarrítmicos de clase I, no debe practicarse ningún deporte, debido a la proarritmogenicidad asociada. Además tras la interrupción del tratamiento los pacientes no deben realizar demasiados esfuerzos deportivos en los días siguientes.
La ablación con catéter es la el tratamiento de elección
En la mayoría de los casos, según Halle y sus colaboradores de Múnich, a los atletas más jóvenes "con fibrilación auricular recurrente y sintomática se les practica un aislamiento de la vena pulmonar, que tiene una buena tasa de éxito". Tras el procedimiento, la vuelta al entrenamiento depende principalmente del estado de la ingle. El entrenamiento de baja intensidad puede reanudarse a partir de unos siete días después de la ablación y el de mayor intensidad al cabo de un mes si no hay complicaciones.
Como deporte para la prevención de episodios de fibrilación auricular, se recomienda a los pacientes un entrenamiento de intensidad moderada, informan Halle y Niebauer. Además, debe tenerse en cuenta que, debido al mayor riesgo de hemorragia bajo anticoagulación oral, debe desaconsejarse a los pacientes con fibrilación auricular la práctica de deportes de contacto y deportes con mayor riesgo de lesión. Sin embargo, muchos atletas tienen una puntuación CHA2DS2 VASc baja (a menudo 0) y, por lo tanto, no necesitan esta anticoagulación.
Este contenido fue publicado originalmente en Univadis Alemania.
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