Erección permanente: seis medidas importantes ante la sospecha de priapismo isquémico

  • Nicola Siegmund-Schultze
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El priapismo isquémico agudo se considera una urgencia urológica por consenso internacional. Las sociedades profesionales estadounidenses han recopilado una "lista de qué hacer" en la práctica clínica a partir de sus guías actualizadas, prestando especial atención a las enfermedades hematológicas subyacentes. Se hace especial hincapié en la importancia de un tratamiento intracavernoso rápido de primera línea con punción de los cuerpos cavernosos, diagnóstico del aspirado e inyección de agentes vasoactivos como la fenilefrina. Según los expertos, este procedimiento es obligatorio incluso en casos de sospecha de priapismo como manifestación inicial de una enfermedad hematológica. Se debe concienciar al paciente de la urgencia de un tratamiento precoz para evitar daños permanentes.

¿Qué es el priapismo?

El priapismo es una erección dolorosa persistente (> 4 horas) que puede causar daños tisulares debido a la isquemia. Tras 6-12 horas de priapismo isquémico agudo aumenta significativamente el riesgo de trastornos permanentes como disfunción eréctil, fibrosis del tejido y acortamiento del pene. Los hombres que padecen anemia falciforme o una enfermedad hematooncológica subyacente, como la leucemia mieloide crónica, corren un riesgo mayor. La Asociación Estadounidense de Urología (AUA), la Sociedad de Medicina Sexual de Norteamérica (SMSNA) y el Colegio Estadounidense de Médicos de Urgencias han recopilado las recomendaciones prácticas más importantes basadas en las guías actualizadas.

Nuevas recomendaciones

Para su redacción se llevó a cabo una evaluación de las revisiones actuales sobre priapismo centrándose en la relación con las enfermedades hematológicas subyacentes y las recomendaciones de las guías según el nivel de evidencia.

Las principales recomendaciones prácticas constan de seis puntos:

  • Debe informarse a los pacientes de que si el priapismo isquémico dura de 6 a 12 horas, el riesgo de daño permanente aumenta significativamente. Con una duración superior a 36 horas, la recuperación completa de la función eréctil es poco probable. Por lo tanto, la urgencia del diagnóstico diferencial (agudo/recurrente/isquémico/no isquémico) y del tratamiento es elevada.
  • Tras la anamnesis y el examen clínico, debe realizarse una punción de los cuerpos cavernosos, con o sin irrigación con suero. El diagnóstico no debe nunca retrasar el tratamiento de un priapismo isquémico agudo.
  • El análisis de los gases sanguíneos del aspirado es esencial para distinguir entre priapismo isquémico y priapismo no isquémico. El priapismo isquémico suele ser persistentemente doloroso, mientras que el no isquémico casi siempre es indoloro. También se deben realizar pruebas de laboratorio, posiblemente con determinación de marcadores tumorales.
  • La aspiración de sangre de los cuerpos cavernosos forma parte del tratamiento agudo de primera línea del priapismo isquémico. Según el panel de expertos, es útil, aunque no obligatorio, combinarlo con la inyección de sustancias vasoactivas como la fenilefrina para inducir la detumescencia y, por tanto, el suministro de sangre oxigenada a los senos cavernosos.
  • Si el priapismo isquémico persiste tras la aplicación intracavernosa de fenilefrina y la aspiración, debe colocarse una derivación entre los cuerpos cavernosos y el glande del pene.
  • Para los pacientes con enfermedades primarias hematológicas y malignas, la prioridad es también el tratamiento inicial del priapismo isquémico. Solo después de esto puede seguir el tratamiento de la enfermedad subyacente, por ejemplo la transfusión de sangre o el intercambio sanguíneo.

Importancia clínica

El tratamiento rápido de primera línea del priapismo según estas recomendaciones consigue la detumescencia en más del 90 % de los pacientes, señala el panel de expertos. Debe considerarse la creación de una fístula artificial si el priapismo no se resuelve tras el tratamiento agudo o si ha estado presente durante mucho tiempo, por ejemplo durante 36 horas.

Las medidas conservadoras como el ejercicio, las compresas frías o los medicamentos orales son ineficaces y no deben utilizarse.

El priapismo como manifestación inicial de una enfermedad hematooncológica es poco frecuente, pero puede suceder.

Financiación: fondos públicos.