Cáncer de próstata localizado: la alimentación mediterránea se relaciona con la reducción del riesgo de progresión

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Punto clave

Seguir una alimentación mediterránea (AM) se asocia con un menor riesgo de progresión del grado en los pacientes con diagnóstico reciente de cáncer de próstata (CP) localizado que reciben tratamiento con vigilancia activa.

Por qué es importante

Debe animarse a los pacientes que se someten a vigilancia activa a que sigan un estilo de vida saludable.

Diseño del estudio

Rellenaron un cuestionario inicial de frecuencia alimentaria 410 pacientes con CP de diagnóstico reciente que se sometieron a vigilancia activa.
La puntuación de AM se calculó en 9 grupos de alimentos ajustados por la energía.
El criterio de valoración fue: la progresión del grado según Gleason.
Financiación: no se reveló ninguna.

Resultados clave

La mediana de la puntuación de AM fue de 4.
La mediana del período de seguimiento fue de 36 meses.
El 18,5 % de los pacientes notificó progresión del grado.
La puntuación de AM alta frente a baja se asoció con un menor riesgo de progresión del grado:
- HR ajustado: 0,67 (p_tendencia = 0,05).
Un mayor seguimiento de una alimentación mediterránea se asoció con un menor riesgo de progresión del grado en:
- los hombres que no eran blancos (HR por aumento en 1 unidad en la puntuación AM: 0,64; IC del 95 %: 0,45-0,92);
- los hombres sin diabetes (HR por aumento de 1 unidad en la puntuación AM: 0,82; IC del 95 %: 0,71-0,96).

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